El líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, lanzó un duro ataque contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la sesión de control parlamentario celebrada este miércoles. Feijóo aprovechó un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que implica al exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, en presuntas comisiones del 2% en contratos públicos.
La confrontación se produjo en un momento crítico para el Gobierno, que acaba de aprobar el techo de gasto pero carece de mayoría parlamentaria para aprobar los Presupuestos de 2026.
El líder del Partido Popular (PP) utilizó la revelación del informe de la UCO, conocido el martes, como munición principal. «La cloaca es Ferraz y usted la ha llevado a La Moncloa», declaró Feijóo con contundencia, en referencia a la sede del PSOE.
La UCO envió al juez Leopoldo Puente del Tribunal Supremo un documento de más de 200 páginas que señala un «papel nuclear» de Cerdán en una red que habría reservado comisiones del 2% de la constructora Acciona. Según el informe, la empresa Servinabar, de la que Cerdán posee el 45%, habría recibido pagos irregulares.
Las acusaciones cruzadas
Feijóo cuestionó la capacidad legislativa del Gobierno: «¿Para sacar algo adelante al Parlamento hay que reservarle una mordida del 2% al PSOE?», preguntó.
También criticó que el Ejecutivo gobierne «sin el Parlamento» y que «dicta sentencias» para «protegerse en el poder».
El presidente del Gobierno respondió con su lema de «tolerancia cero contra la corrupción, no cero respuestas». Sánchez contraatacó recordando la detención este martes de Javier Aureliano García, presidente de la Diputación de Almería del PP, por presunta corrupción en el caso de las mascarillas.
«Lleva un año aplaudiendo a Mazón y viene a dar clases de ejemplaridad», espetó Sánchez a Feijóo.
Feijóo le reprochó que «su moción de censura no fue contra la corrupción. Su moción de censura fue para la corrupción de su cuadrilla».
El desafío presupuestario
Más allá de las acusaciones de corrupción, el intercambio evidenció las dificultades del Gobierno para gobernar. Sánchez defendió la aprobación del techo de gasto este martes, con un incremento histórico del 8,5% que supera los 210.000 millones de euros. Prometió «unos presupuestos» basados en «estabilidad, capacidad de diálogo con los grupos y resultados».
Sin embargo, la coalición gubernamental carece de los apoyos necesarios. Junts ha anunciado que no garantizará la continuidad del Gobierno tras acusar al PSOE de incumplir acuerdos previos. Sin los siete votos de Junts, el Ejecutivo pierde la mayoría parlamentaria.
Feijóo ironizó sobre la situación: «Si esta legislatura se puede pasar sin Presupuestos, entiendo que la siguiente también, ¿no?». El PP recordó que España podría enfrentar un tercer año consecutivo de prórroga presupuestaria si no se aprueban las cuentas de 2026.
Sánchez también redefinió el concepto de corrupción en su discurso. «Hay otro tipo de corrupción que es la corrupción de privatizar servicios públicos a costa de la clase media trabajadora», afirmó.
El presidente instó a las comunidades autónomas a invertir los 170.000 millones de euros de financiación en fortalecer sanidad, educación y dependencia.
El enfrentamiento de este miércoles refleja la profunda polarización política en un momento en que ambos bloques se acusan mutuamente de corrupción, mientras el Gobierno socialista afronta serias dificultades para aprobar su agenda legislativa.
Nota: Este artículo fue creado con Inteligencia Artificial (IA).

1 godzina temu











