Sergio Scariolo puso fin a su etapa como seleccionador de baloncesto masculino tras la derrota de España ante Grecia por 86-90 en el Eurobasket. La eliminación en la fase de grupos supone el adiós prematuro del técnico italiano después de 15 años al frente de 'La Familia'.
España quedó fuera de los octavos de final tras caer en la quinta jornada de su grupo. El equipo remontó una desventaja de 15 puntos pero no logró evitar la eliminación del torneo continental que se celebra en Chipre.
Despedida emotiva del seleccionador
«Toda historia de amor llega a su fin», declaró Scariolo en rueda de prensa desde Limasol. El técnico comparó su separación del equipo nacional con un divorcio: «Es como cuando un esposo y una esposa se separan, por cualquier motivo, pero siguen quedando y pasando tiempo juntos. Tenemos hijos».
«Lo primero, obviamente, hay que felicitar a Grecia. Tienen un equipo increíble con muchos grandes jugadores y una superestrella; sin duda, están entre los cuatro o cinco mejores equipos de Europa», reconoció el entrenador sobre el rival.
Scariolo mostró su orgullo por el esfuerzo del equipo pese a la derrota. «Obviamente, a nadie le gusta perder su último partido. Me encantaría ganarlo, pero no puedo estar más orgulloso del esfuerzo de mis jugadores. Es increíble cómo han remontado 15 puntos de desventaja», afirmó.
Confianza en la nueva generación
El seleccionador destacó especialmente a los jóvenes bases Mario Saint-Supéry y Sergio de Larrea, ambos de 19 años. «Terminamos el partido con dos chicos de 19 años sobre la cancha, pero se merecían terminar el partido y tener la oportunidad de jugar, porque son el futuro», explicó.
«El futuro es brillante», vaticinó Scariolo sobre las perspectivas del baloncesto español. El técnico animó a los jugadores a mantener la unión: «Le recomiendo a mis jugadores que sigan unidos, que sigan amando esta camiseta, que sigan confiando en el increíble trabajo que está haciendo la federación».
Legado y valores de 'La Familia'
Scariolo recordó la transformación del baloncesto español desde su llegada. «Cuando llegué a España por primera vez en 1997, veía buen baloncesto, pero una falta de competitividad sorprendente. Entonces llegó la generación de los nacidos en los 80 y empezaron a demostrar a todos que el juego español no solo puede jugar bien, sino también ganar», relató.
El entrenador subrayó los valores que caracterizan al equipo nacional. «El valor siempre ha estado en la cima, nunca nos rendimos, no importa quién sea el rival, no importa cuánto talento tengamos, no importa el marcador», describió desde el Spyros Kyprianou Arena.
«Nadie es irremplazable, sin duda», admitió Scariolo sobre su sucesión. El técnico, que se incorporará al Real Madrid, se despidió con optimismo: «Y una vez más estaré muy feliz de ver el trabajo de estos chicos».
Fuentes utilizadas: "Europa Press" Nota: Este artículo ha sido editado con la ayuda de Inteligencia Artificial.